Los requisitos unificados de seguridad cibernética de la Asociación Internacional de Sociedades de Clasificación (IACS) que entrarán en vigor el
1 de enero de 2024 presagian una reestructuración para la industria de suministro. Para cumplirlos, requerirán todo el espectro de sistemas críticos
de control y navegación a bordo.

Las nuevas tecnologías y la creciente automatización y digitalización se están combinando para optimizar la eficiencia de la industria marítima. Pero junto con el creciente número de embarcaciones integradas que cuentan con múltiples sistemas interconectados, surge la amenaza de ataques remotos que potencialmente pueden obtener acceso o afectar los sistemas críticos de control a bordo. Es necesario implementar una ciberseguridad óptima para garantizar que los buques permanezcan en funcionamiento y salvaguardar la seguridad de la tripulación, los pasajeros, los activos y el medio ambiente.

Es fundamental implementar medidas preventivas óptimas contra los ciberataques

“El transporte marítimo es la columna vertebral del comercio mundial y la posible perturbación que podrían causar los ataques, sin mencionar el peligro para la vida y la propiedad, es una clara tentación para los ciberdelincuentes y los piratas informáticos patrocinados por el Estado.

Es imperativo proteger tanto la infraestructura corporativa como los buques individuales en medio de una conectividad cada vez mayor de los buques. La mayoría de la gente es consciente de los riesgos, ahora la atención se centra en implementar medidas preventivas óptimas”, dice Jarle Coll Blomhoff, líder del grupo Seguridad cibernética, sistemas de control y puentes – Clasificación de buques marítimos en DNV.

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